Un día en el paraíso. Este sería el titular de mi encuentro con Laura Casanova @candyliving en su finca ecológica en donde se puede hacer turismo rural en un entorno de paz, naturaleza, buena comida, paseos y gente con un corazón muy bonito.
Yo vivo a unos 35 minutos de Masía Escrigas en donde vive Laura y reconozco que no esperaba sorprenderme tanto. No sabía que tan cerquita había lugares así. Aparqué el coche y por la paz que se respiraba sabía que no me querría marchar.
A mi llegada Laura me enseñó la Masía, tan bella y bien decorada, con unas cocinas en las que me hubiese puesto a cocinar en aquel mismo momento. No hablo de las cocinas de ningún restaurante, hablo de las cocinas que forman parte de las habitaciones y espacios que se pueden alquilar en la casa para pasar unos días de calma haciendo turismo rural, pero de todo eso no voy a hablar yo, ella lo tiene todo muy bien explicado en su web http://www.casanovacountryhomes.com lo puedes mirar con calma.
Después de dar una pequeña vuelta por la Masía, acariciar los caballos y disfrutar de las vistas, nos sentamos en su cocina a tomar un té. Ambas sentimos pasión por la agricultura ecológica y tenemos, a parte, muchas cosas en común…se nos pasó la mañana con una buena conversación sin a penas darnos cuenta. Vida, proyectos, ilusiones…salieron muchas cosas que me encantó compartir con una persona valiente, luchadora, inteligente y con un gran corazón. Aún nos quedaba tiempo y nos fuimos a pasear por la Riera de Marlès…que belleza!
Llegada la hora de comer, nos metimos en el huerto ya que en el restaurante que han puesto en marcha hace muy poco, necesitaban col kale de su propio cultivo para uno de los platos que sirven: el trinxat de col kale del huerto con butifarra negra. Cogimos las kale y nos fuimos a comer a su espacio, el Hostal Sant Maurici a 5 minutos de allí, en el pueblo más pequeño que he visto nunca: La Quar, con una iglesia, un pabellón deportivo que sirve de Ayuntamiento, el restaurante y poco más.
Comida tradicional de la zona, con productos locales, con sus verduras del huerto ecológico…y nuestra charla siguió y siguió.

Cogiendo col kale
Todo lo bueno se acaba y bien entrada la tarde nos despedimos con nuestros primeros lazos de amistad tejidos. Laura muchas gracias POR TODO: por la conversación, la compañía, lo compartido, la comida, el paseo, las risas y más!
Estas cuatro líneas de aquí no pueden explicar todo lo que hay detrás de esta mujer y su vida en el campo con sus dos hijos, te animo a que eches un vistazo a su blog para ver el “mucho más” que aquí no se ve https://candylivingdiaries.com

Establo caballos

Paseo por Riera de Marles

Riera de Marles

Escalera interna Masía Escrigas